Hace ya bastante tiempo vi esta receta en el blog bocados dulces y salados, me gusto mucho y me la guardé para hacerla, pero pasó el tiempo y hasta el otro día no me acordé que la tenia.
Sin pensármelo dos veces me puse manos a la masa (nunca mejor dicho) y el resultado ha sido todo un éxito, ya no me queda ninguna!
Mis hijos las han devorado, bueno, mi marido y yo también hemos colaborado!
Muy fáciles de hacer y súper deliciosas.
INGREDIENTES:
250 gr de harina común
125 gr de mantequilla a temperatura ambiente
65 gr de azúcar
1 huevo
La ralladura de un limón, sólo la parte amarilla sin nada de blanco
PREPARACIÓN:
Empezaremos batiendo el huevo.
En un bol mezclaremos la harina, la mantequilla (es muy importante que esté a temperatura ambiente, la sacaremos unas horas antes de la nevera), el huevo batido, el azúcar y la ralladura de la piel del limón.
Lo amasaremos con fuerza, con las manos, hasta conseguir que la masa se nos despegue por completo.
Una vez la masa este bien homogénea, la colocaremos sobre dos papeles de hornear y la estiraremos con un rodillo hasta conseguir el grosor deseado. Dejamos reposar la masa una hora en la nevera y una vez pasado el tiempo, precalentamos el horno a 170 ºC mientras cortamos las galletas con el cortapastas que más nos guste.
Forramos la bandeja del horno con papel de hornear y ponemos las galletas con una cierta distancia entre ellas (es posible que tengas que hacer un par de horneadas), hornearemos durante unos 10 minutos o hasta que este doraditas.
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